La enfermedad de Ménière es considerada como una enfermedad rara que afecta al oído interno y lo habitual es que provoque mareos, vértigo y pérdida auditiva. Es una patología que se origina por la acumulación de líquido en una parte del laberinto en el oído interno.
Es una enfermedad que sufren personas de distintas edades, aunque es más frecuente entre los 40 y los 60 años. Es para toda la vida y para hacerla más llevadera hay tratamientos que pueden mejorar la vida de las personas que la padecen.
Resonancia Magnética para el diagnóstico
La resonancia magnética con contraste intravenoso sirve para realizar el diagnóstico de la enfermedad de Mèniére provocada por la alteración del líquido endolinfático del oído interno. Para este procedimiento de diagnóstico no invasivo y muy preciso es necesario un equipo de resonancia magnética de 3 Teslas de potencia, la máxima permitida actualmente en el estudio del cuerpo humano.
La enfermedad de Ménière, también denominada vértigo Ménière, presenta unos síntomas que pueden ayudar a reconocerla entre ellos presión en el oído enfermo, mareos, sensación de inflamación del oído, pérdida de audición, percepción de ruido en el oído, acúfenos (tinnitus) y vértigo.
Diagnóstico multidisciplinar
Cuando tenemos alguno de estos síntomas es importante acudir al especialista y describirlos de la manera más precisa posible. La resonancia magnética es una prueba esencial para poder diagnosticar de forma precisa la enfermedad de Ménière y observar con precisión la existencia de un tipo de alteración en los líquidos del oído interno. En esta enfermedad cabe destacar como bastante relevante la colaboración de un equipo multidisciplinar compuesto por otorrinos y radiólogos.