La Resonancia de Intestino también se llama Entero Resonancia y es una prueba que sirve para ver las paredes del intestino y averiguar la presencia de malformaciones, divertículos, inflamación, fístulas e incluso, tumores. La Resonancia Magnética del intestino se ha situado como una prueba muy eficaz frente a otros procedimientos más tradicionales porque puede valorar el nivel de inflamación de las capas de la pared intestinal y también alertar de posibles complicaciones.
En el grupo de enfermedades intestinales (EII) se encuentran la enfermedad de Crohn, la colitis ulcerosa y la EII inclasificable. Se trata de enfermedades crónicas autoinmunes que se desarrollan especialmente en la adolescencia aunque también se producen casos en adultos y en personas mayores. Se producen cuando organismo presenta una respuesta inflamatoria exagerada y continuada en el intestino.
Factores
La genética es uno de los factores que provocan las enfermedades intestinales aunque hay que señalar que no son hereditarias. También influyen los factores ambientales siendo el más destacado el tabaco, un hábito que, si no se deja, acaba afectando gravemente en la evolución de estas enfermedades. El uso de antibióticos en la infancia puede provocar el desarrollo de estas patologías en el intestino.
Síntomas
Entre los síntomas de la enfermedad de Crohn se encuentra dolor del abdomen, colitis o pérdida de peso mientras que uno de los indicios que puede hacer saltar las alarmas por la colitis ulcerosa puede ser diarrea con sangre. Ambas patologías también presentan otros síntomas comunes como fatiga, anemia o distintas alteraciones en las articulaciones o en la piel.
Una técnica precisa y cómoda para el paciente
La prueba ideal para completar el diagnostico es la Resonancia Magnética porque es una técnica no invasiva, sin radiación ionizarte, más cómoda para el paciente que además es vital para la clasificación y la planificación de una intervención quirúrgica. Al tratarse de un método de imagen con gran amplitud de campo visual hay límites a la hora de alcanzar los distintos tramos del intestino, por muchas dificultades que se encuentren en su recorrido. A todo ello hay que sumar que este procedimiento de imagen puede observar otras partes del abdomen y así descubrir cambios en otros órganos como hígado, bazo, riñones…
La tecnología que se utiliza para estudiar las enfermedades intestinales es una Resonancia Magnética de alto campo y suele realizarse a las personas en las que haya indicios de padecer estas enfermedades o también para tener un diagnóstico firme de enfermedad inflamatoria intestinal, enfermedad de Crohn, fístulas intestinales o colitis ulcerosa.
